El abrigo de Tortosilla (Ayora) fue descubierto por los hermanos Serrano en el verano de 1911, convirtiéndose en la primera muestra de arte rupestre prehistórico descubierta en la Comunidad Valenciana.
Inicialmente las extraordinarias figuras naturalistas de hombres y animales que decoraban sus paredes fueron consideradas Paleolíticas. Sin embargo, 100 años de estudios de arte rupestre en tierras valencianas han permitido definir otra tradición artística prehistórica, denominada Arte Rupestre Levantino, a la que pertenece este primer conjunto valenciano.
La singularidad de las escenas de caza, recolección de la miel, guerra, maternidad o muerte de los paneles Levantinos justificó su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1998.
El yacimiento es visitable, pero al estar en terreno privado y, sobre todo, para preservar de daños el conjunto artístico, las visitas se deben concertar a través del Ayuntamiento de Ayora.
Inés Domingo, comisaria de ‘Abric de Tortosilla. 100 anys’ ha dicho que las pinturas rupestres muestran detalles únicos sobre los primeros moradores de Ayora ofreciendo “una ventana abierta al pasado prehistórico valenciano”.
Según Domingo, al observar el “impresionante conjunto de arte rupestre levantino de Tortosilla, cuyo valor excepcional es universal, descubrimos detalles de indumentaria, escenas cotidianas con hombres, mujeres y niños, en las que podemos incluso apreciar algunos rasgos faciales, y representaciones simbólicas”.